/ jueves 7 de abril de 2022

Tras bambalinas | ¡Fenómeno cucaracha!

Desde hace varios días que salió publicada una nota en Diario del Sur, sobre la llegada de pandilleros provenientes de El Salvador, la población se encuentra a la expectativa. Recientemente en Tapachula se volvieron a encender los focos rojos, primeramente por los homicidios violentos en los que se deja entrever “ajustes de cuenta” entre grupos del crimen organizado, sin embargo, los boletines oficiales reflejan una realidad maquillada ajena a esta aldea.

Hace muchos años el tema de las pandillas causó mucha zozobra en Tapachula incluso se dice que se formó un grupo especial para desaparecer a estas células delictivas y con ello poner orden, pero sobre todo recobrar la tranquilidad, en esta ocasión ya se pide se tomen cartas en el asunto para evitar este fenómeno “cucaracha”, sea provocado y que en breve tengamos viviendo aquí a varios de ellos.

Allá en El Salvador, su presidente Nayib Armando Bukele Ortez, ha declarado la guerra a las pandillas, incluso ya los amenazó que si continúan con sus homicidios violentos en contra de la población los va dejar sin alimento en la prisión, lo que, para muchos atenta contra los derechos humanos, es aplaudido por un número mayor de ciudadanos salvadoreños.

“Andan rumores que quieren empezar a vengarse de la gente honrada al azar, hagan eso y no va a haber un tiempo de comida en las cárceles. Les juro por Dios que no comen arroz y vamos a ver cuánto duran”, expresó Bukele.

Retomando estas medidas enérgicas en donde se deja entrever que no le tiembla la mano a este mandatario, la realidad para la frontera sur de México es otra, debido a que aquí la incidencia de feminicidios va a la alza, los homicidios por ajustes de cuentas también y la posible llegada de pandilleros del Salvador para Tapachula vendría a abonar a mayor inseguridad, por lo que la población está pidiendo a gritos que regresen de inmediato los operativos antipandillas y que recorran todas las colonias de esta ciudad y municipios fronterizos.

Por si fuera poco, se ha dejado entrever que en próximas fechas saldrá de Honduras una caravana más de migrantes con destino a esta ciudad de Tapachula para posterior seguir su trayecto hacía los Estados Unidos, ellos ya se dieron cuenta que aquí las autoridades del Instituto Nacional de Migración a cargo de la delegada Paola López Rodas han sido rebasadas en capacidad de personal y mental para atenderles, lo que aprovechan con las amenazas de manifestaciones y logran sus trámites , incluso que hasta les pongan transporte para trasladarse a otra entidad.

Todo esto, que acontece en Tapachula sigue generando problemas sociales, el tema migratorio que no es nada nuevo ni un secreto a voces, requiere de una atención especial, pero también una vigilancia con lupa para evitar que se infiltren integrantes de las pandillas que mantienen asoleado no solo a El Salvador sino también a Honduras.

REFLECTORES

La población de Tapachula se sigue quejando de la insuficiencia de atención de la policía municipal, algunos elementos han expresado que el parque vehicular es inservible y escaso, las patrullas que se entregan una y otra vez son las mismas, así como las motocicletas, por lo que desconocen lo que está sucediendo al interior, pero, sobre todo por la omisión del titular de la secretaría de seguridad pública municipal quién debería ser investigado a fondo. Dicen que no hay una estrategia y que andan sin rumbo por las calles, tratando de hacer como que cuidan a la ciudad.

Correo: checha.informa@gmail.com

Desde hace varios días que salió publicada una nota en Diario del Sur, sobre la llegada de pandilleros provenientes de El Salvador, la población se encuentra a la expectativa. Recientemente en Tapachula se volvieron a encender los focos rojos, primeramente por los homicidios violentos en los que se deja entrever “ajustes de cuenta” entre grupos del crimen organizado, sin embargo, los boletines oficiales reflejan una realidad maquillada ajena a esta aldea.

Hace muchos años el tema de las pandillas causó mucha zozobra en Tapachula incluso se dice que se formó un grupo especial para desaparecer a estas células delictivas y con ello poner orden, pero sobre todo recobrar la tranquilidad, en esta ocasión ya se pide se tomen cartas en el asunto para evitar este fenómeno “cucaracha”, sea provocado y que en breve tengamos viviendo aquí a varios de ellos.

Allá en El Salvador, su presidente Nayib Armando Bukele Ortez, ha declarado la guerra a las pandillas, incluso ya los amenazó que si continúan con sus homicidios violentos en contra de la población los va dejar sin alimento en la prisión, lo que, para muchos atenta contra los derechos humanos, es aplaudido por un número mayor de ciudadanos salvadoreños.

“Andan rumores que quieren empezar a vengarse de la gente honrada al azar, hagan eso y no va a haber un tiempo de comida en las cárceles. Les juro por Dios que no comen arroz y vamos a ver cuánto duran”, expresó Bukele.

Retomando estas medidas enérgicas en donde se deja entrever que no le tiembla la mano a este mandatario, la realidad para la frontera sur de México es otra, debido a que aquí la incidencia de feminicidios va a la alza, los homicidios por ajustes de cuentas también y la posible llegada de pandilleros del Salvador para Tapachula vendría a abonar a mayor inseguridad, por lo que la población está pidiendo a gritos que regresen de inmediato los operativos antipandillas y que recorran todas las colonias de esta ciudad y municipios fronterizos.

Por si fuera poco, se ha dejado entrever que en próximas fechas saldrá de Honduras una caravana más de migrantes con destino a esta ciudad de Tapachula para posterior seguir su trayecto hacía los Estados Unidos, ellos ya se dieron cuenta que aquí las autoridades del Instituto Nacional de Migración a cargo de la delegada Paola López Rodas han sido rebasadas en capacidad de personal y mental para atenderles, lo que aprovechan con las amenazas de manifestaciones y logran sus trámites , incluso que hasta les pongan transporte para trasladarse a otra entidad.

Todo esto, que acontece en Tapachula sigue generando problemas sociales, el tema migratorio que no es nada nuevo ni un secreto a voces, requiere de una atención especial, pero también una vigilancia con lupa para evitar que se infiltren integrantes de las pandillas que mantienen asoleado no solo a El Salvador sino también a Honduras.

REFLECTORES

La población de Tapachula se sigue quejando de la insuficiencia de atención de la policía municipal, algunos elementos han expresado que el parque vehicular es inservible y escaso, las patrullas que se entregan una y otra vez son las mismas, así como las motocicletas, por lo que desconocen lo que está sucediendo al interior, pero, sobre todo por la omisión del titular de la secretaría de seguridad pública municipal quién debería ser investigado a fondo. Dicen que no hay una estrategia y que andan sin rumbo por las calles, tratando de hacer como que cuidan a la ciudad.

Correo: checha.informa@gmail.com