A Doble Espacio
“Un poco más será un alivio para dos fracasos”, dice la canción del inolvidable Álvaro Carrillo. Pongamos el fracaso del neoliberalismo como política depredadora y voraz. Y luego viene el fracaso del populismo con Ortega en Nicaragua, Maduro en Venezuela, Evo en Bolivia y la Krishner en Argentina. Andrés Manuel López Obrador parece ir derechito a consumar el segundo fracaso mexicano. Entonces, necesitamos “un poco más” para que nos alivie del populismo.
La hija de Hugo Chávez es una de las cinco personas más ricas de Latinoamérica. Eso demuestra que las ideologías “contra los ricos” no pasan del discurso, porque los fustigadores de los ricos ya están ricos, pero no lo dicen.
Ni usted ni yo sabemos si Andrés Manuel es rico… Todavía, pero cuando algo se le descubra, sabremos que no está donde está porque odia el dinero. Presume de no tener cuentas bancarias. En México o Estados Unidos, es probable. A su nombre, es probable que no las tenga, pero no ha habido otra excepción en la política que no sea Pepe Mújica, quien tampoco se distinguió por haber sacado a los pobres de su condición. Se sumó a ellos y ya.
Estoy de acuerdo en que no era justo que continuara el régimen anterior. Absolutamente. Lo que vino, por desgracia, no llegó para resolver y sí para sorprender por su ineficacia hasta el momento. Es buena la lucha contra el huachicoleo; es malo que no la hayan emprendido inteligentemente. Es bueno que se vayan contra los sueldos de los ministros de la Suprema Corte; es malo que no lo hayan conseguido. Es bueno que hayan atacado a los bancos; es malo que los bancos acabaran saliéndose con la suya porque pusieron en peligro al sistema de circulación del dinero en México.
Son buenas las intenciones, lo malo es que no saben cómo resolver los problemas. Entró una chiva en la cristalería y aquí están los resultados hasta el momento.
Un poco más y a lo mejor nos comprendemos luego y encontraremos la salida a este laberinto en que metieron a la sociedad.
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