“El mariachi suena, con alegre son”, canta la inolvidable María de Lourdes en una de sus grabaciones. Es, el mariachi, el alma musical de México e identidad de nuestro país ante el mundo. En varias naciones como en Colombia y Holanda, entre muchas otras, se le rinde culto lo mismo que a nuestra música, la auténtica, la tradicional; no a las fusiones tan en boga hoy en día cuando los géneros musicales se han perdido y, sin embargo, el mariachi pervive, aunque con sus bemoles, sus “asegunes”. No hay nuevos grupos de mariachi y los que había en una época de oro para ellos, ya desaparecieron y los que quedan sufren para conseguir empleo.
“El problema -dice Oswaldo Vázquez, fundador y director del mariachi Arriba Juárez que acompañó a Juan Gabriel durante varios años-, es que al mariachi se le relegó a ser grupo de acompañamiento; en vez de proyectarlo a nivel estelar lo degradaron a un segundo plano. El crédito siempre se lo llevan los cantantes”.
Es cierto: Sin el apoyo del mariachi no habría intérpretes vernáculos como los Fernández -Vicente, Alejandro y Pedro-, Pepe Aguilar, Aída Cuevas, Luis Miguel y hasta Julio Iglesias y José Luis Rodríguez que alguna vez grabaron con mariachi; o como los hubo en el pasado: Lola Beltrán, Juan Gabriel, la española Rocío Dúrcal, Miguel Aceves Mejía, El Charro Avitia, Antonio Aguilar, la propia María de Lourdes, la única Embajadora de la Música Mexicana, y tantos otros.
De todas formas, el mariachi está presente en la vida nacional como parte de la cultura nuestra; ya sea en serenatas, fiestas privadas, ferias, teatros del pueblo, grabaciones, cine y televisión, actos políticos y diplomáticos; eventos de todo tipo donde nos enchinan la piel, nos ponen a cantar y nos hacen gritar ¡viva México! De ahí que es patrimonio inmaterial declarado hace algunos unos años por la Unesco.
Pero vayamos por partes: ¿Ya se percataron que en ningún momento hemos utilizado el término “mariachis”? Es equívoco. Siempre hemos sostenido aquí que es un craso error anunciar que “ahí vienen los mariachis”. Lo correcto esdecir “ya llegó el mariachi” o en todo caso “ahí vienen los músicos del mariachi”. Cuestión de colectivo de personas.
Oswaldo Vázquez está de acuerdo y considera que “en México hace falta cultura musical, de ahí la ignorancia de la gente”. El también trompetista y arreglista se siente afortunado porque ya cumple 17 años tocando con su mariachi en conocido restaurante-bar de la Zona Rosa, en la Ciudad de México, aunque, desde luego, acompañando la variedad.
Sin embargo, admite que a lo largo de la historia del mariachi hemos tenido grupos muy buenos como el Vargas de Tecalitlán, sin duda el número uno, y menciona al América de Jesús Rodríguez de Híjar, al Águilas de Javier Carrillo, sin olvidar al 2000 de Cutberto Pérez, al Nuevo Tecalitlán, al reciente Santa Cecilia o al México 70 de Pepe López que tuvo su cénit vía el programa Siempre en domingo en su mejor época.
Cabe señalar que las mujeres se han integrado al mariachi formando así grupos mixtos como Los alazanes de Hipólito Rosas, o integrando sus propios de mariachi netamente femenil.
Otro sin embargo es que en la actualidad algunos de los grupos de antaño sólo existen de nombre, pues resulta muy fácil acudir a la plaza Garibaldi, contratar músicos para armar un grupo y anunciarlo como si fuera el original. Eso es práctica común, denigrante y fraudulenta.
EL ORIGEN
Fue el maestro Cirilo Marmolejo, de Teocaltiche, Jalisco, el creador del mariachi Coculense, considerado el primero en su tipo allá por 1918. Nacido en 1890, Marmolejo tocaba el guitarrón y la vihuela. Fue el primero en realizar una gira y grabar en Estados Unidos. También se le atribuye añadirle una trompeta al grupo.
Más tarde el compositor y violinista Rubén Fuentes, también de Jalisco, dio forma al mariachi sinfónico, perteneciendo además como violinista, director musical y arreglista del archifamoso mariachi Vargas de Tecalitlán, de don Silvestre Vargas.
Rubén es compositor de unas 60 canciones que han aportado un sonido y un estilo propios al mariachi. ¿Quién no ha escuchado melodías como Qué bonita es mi tierra, La culebra, El son de la negra, Camino real de Colima, Sabes una cosa, Las alazanas, Cartas a Eufemia, Copa tras copa, La verdolaga y hasta La bikina, por mencionar algunas? Su aportación a la música del mariachi ha sido fundamental y determinante. Sin Rubén Fuentes no se entendería la genuina música mexicana.
EL NOMBRE
Se sugería que el nombre de mariachi provenía, probablemente, del vocablo francés mariage (matrimonio) y que se adaptó a los músicos mexicanos que animaban las bodas en el siglo XIX; sin embargo, investigaciones posteriores han determinado que la expresión mariachi era una voz común en las inmediaciones de Cocula, Jalisco, derivado posiblemente del diminutivo de un nombre impreciso de la lengua náhuatl que podría referirse a María o Marina (Diccionario de Música en México, de Gabriel Pareyón, Secretaría de Cultura del Gobierno de Jalisco, 1995).
El mismo texto explica que “mariache” era una tarima donde se bailaba “toda la noche y aún de día” a ritmo de jarabe con músicos que tocaban el arpa, el violín y la vihuela.
LA DOTACIÓN
Aunque el número de elementos varía, un grupo de mariachi se compone de cuatro violines, dos trompetas (melodías), guitarra (acompañamiento), guitarrón (bajo) y vihuela (una guitarra de sonido agudo de tamaño más chico y de cuatro cuerdas); en ocasiones se le añaden el arpa y la flauta. Pero ya agregarle congas o batería y hasta guitarras eléctricas, es aberrante.
LA ENTREVISTA
El maestro Oswaldo Vázquez consideró que entre los grandes compositores de música de mariachi destaca José Alfredo Jiménez, a quien se deben melodías como El jinete, A la luz de los cocuyos, Camino de Guanajuato, Me cansé de rogarle, Un mundo raro, El rey, Que te vaya bonito y muchas otras; pero también resalta a Tomás Méndez, Alberto Cervantes, Fernando Z. Maldonado y, por supuesto, Juan Gabriel, a quien acompañó durante varios años.
“Lamentablemente -externó-, los grupos de mariachi prácticamente ya no tenemos trabajo. Los tiempos han cambiado: La carestía, la tecnología. Ahora los patrones buscan pagar un menor número de elementos".
TOP 5, LOS MÁS FAMOSOS
1.- Vargas de Tecalitlán (Silvestre Vargas)
2.- América (Jesús Rodríguez de Híjar)
3.- Águilas de América (Javier Carrillo)
4.- Arriba Juárez (Oswaldo Vázquez)
5.- Oro y Plata (Pepe Chávez)
EL MARIACHI EN EL MUNDO
La música del mariachi se ha expandido por el mundo a tal grado que existen en un gran número de países grupos de mariachi de un alto nivel musical como, por ejemplo:
1.- ESTADOS UNIDOS: Los camperos
2.- HOLANDA: Tierra caliente
3.- JAPÓN: Samurái
4.- CROACIA: Los caballeros de Croacia
5.- ITALIA: Romatitlán
6.- COLOMBIA: Vargas de Bogotá
7.- ESPAÑA: Real azteca
8.- INGLATERRA: Las Adelitas UK
9.- CANADÁ: Estrellas de Vancouver
10.- ALEMANIA: Mariachi Band Frankfurt