EL mercado Soconusco o mejor conocido como “mercadito de la estación”, ubicado sobre la central sur, cuyo inmueble data desde hace más de 46 años, es uno de los centros de abasto más representativos de las ciudad, sin embargo, con el paso del tiempo y ante la falta de mantenimiento por parte de las autoridades municipales, se encuentra en pésimas condiciones.
En representación de un grupo de locatarios, Martiniano Reyes Palacios, afirmó que hace 20 años fue la última vez que el mercado recibió trabajos de mantenimiento por parte de las autoridades, y a pesar de que en diversas ocasiones han solicitado vía escrita al Ayuntamiento de Tapachula el apoyo para la rehabilitación de la infraestructura, las autoridades han sido sordas a esta petición.
Dijo que la infraestructura del inmueble presenta severos daños, principalmente en el techo de asbesto, el cual está convertido en una auténtica “coladera”, ya que, en la época de lluvia, hay demasiadas filtraciones, las cuales provocan afectaciones y pérdidas de productos en los locales comerciales.
Señaló que además los locales comerciales están deteriorados, carecen del servicio de drenaje y de la falta de seguridad, cuyas condiciones representan un riesgo de salud y un peligro físico, ya que ante los constantes sismos, el techo y paredes corren el peligro de derrumbarse.
Por su parte, Arnulfo Amores González, indicó que las deplorables condiciones en que se encuentra el inmueble, ha influido en las bajas ventas, ya que las personas no llegan realizar sus compras, situación que representa un duro golpe en la economía de los comerciantes, lo que ha obligado a algunos locatarios a cerrar sus negocios durante la pandemia, ya que no obtienen recursos ni para cubrir los servicios básicos.
Puntualizó que las autoridades municipales los tienen en total abandono, ya que ni siquiera los apoyan con la pintura del inmueble, a pesar de que de manera puntual pagan sus impuestos como locatarios de este importante mercado
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Lamentó que no haya una cercanía entre las autoridades y los locatarios para trabajar conjuntamente en el intento por rescatar este mercado, que con el paso de los años el deterioro de techado, pisos y paredes se ha convertido en riesgo para los que ahí trabajan y para las personas que acuden a realizar sus compras.
Finalmente los entrevistados coincidieron en que tomarán otras medidas más enérgicas para que sean escuchados por las autoridades, a fin de que se que se establezca un programa para el rescate de los mercados públicos, ya que, del funcionamiento de estos inmuebles, depende la economía de cientos de familias que se dedican a la venta de productos de primera necesidad.
