El Ministerio Público (MP) de Guatemala alertó a sus ciudadanos sobre la venta de huevos mexicanos, que están ingresando de contrabando a este país y la peligrosidad de adquirir este producto de la canasta básica.
Rossana Pérez, integrante de la Fiscalía de Defraudación y Contrabando Aduanero, declaró que este producto no tiene las garantías sanitarias para el consumo en Guatemala, debido a que en México todavía existe la influenza o gripe aviar, la cual en 48 horas extermina por completo una granja avícola y eso sería un grave riesgo para la economía del país.
La funcionaria del gobierno guatemalteco puntualizó que han detectado sitios en redes sociales a través de los cuales se venden estos huevos a precios accesibles para el público, por lo que ya se inició una investigación.
Aclaró que es difícil identificar si este producto proviene de Chiapas o es producto nacional certificado, por lo que pidió a la población realizar la compra de este insumo en lugares establecidos dentro de su país.
Mercado negro en Facebook
Decenas de usuarios de la red social Facebook ofrecen casilleros de huevos desde los 50 hasta 60 pesos, dependiendo la marca.
Es por esta vía que decenas de usuarios iniciaron con la venta de este producto desde iniciada la pandemia, debido a que muchos supermercados chapones comenzaron a limitar el número de piezas para no caer en el desabasto, aunado a que ofrecían mejores precios al comprador.
Al iniciar una búsqueda en esta red social, los usuarios que se dedican a la venta de este insumo aparecen en un “catálogo” al cual el usuario puede acceder y elegir el que le resulte más atractivo.
Diario del Sur entabló contacto con uno de los vendedores, que ha contestado de forma tardía con la pregunta “¿Aún está interesado?”.
El mediador explica que tienen el servicio a domicilio sin costo alguno. Después cuestiona cuántos casilleros se requieren.
La medida tomada por el gobierno de Guatemala parece no ser tan desmesurada.
El huevo que se comercializa en redes sociales podría tener un origen incierto. Según relata el vendedor al que se consultó, este producto proviene del municipio de Copainalá, en una de las carreteras que conduce al barrio San Juan.
El otro mercado
Pese a la venta que se genera en internet a precios atractivos, existen sitios físicos en los que el huevo alcanza precios menores.
En municipios aledaños a Tapachula como Tuxtla Chico, Cacahoatán y Suchiate, comerciantes ofrecen en 38 pesos el casillero, pero la procedencia del producto también es una incertidumbre.
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La venta de huevos en centros de abastos y calles concurridas de este municipio, ha sido un imán para el comprador que busca adquirir insumos de la canasta básica.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) recomienda a la población adquirir el huevo en establecimientos certificados para su venta, como son supermercados, tiendas de conveniencia y proveedores autorizados en la región que se encargan de distribuir a expendios en otros municipios.
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