El administrador diocesano de Tapachula, presbítero Agripino Méndez Victorio, convocó a los tapachultecos a participar o en su caso a orar y promover la peregrinación que como Provincia Eclesiástica conformada por las tres diócesis de Chiapas: Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal y Tapachula organizan para el próximo 13 de septiembre en la capital del estado para manifestar la necesidad de la paz en la entidad.
El padre Agripino, afirmó que hay preocupación por la situación de violencia creciente en todo Chiapas, consecuencia de la disputa de territorio entre los cárteles de la droga, las desapariciones, las muertes y el aumento exponencial de la inseguridad, entre algunos rostros de la violencia.
Refirió que como Provincia Eclesiástica de Chiapas han organizado una peregrinación por la Paz en Tuxtla Gutiérrez, como signo visible de que todos necesitan la paz; misma que se realizará el viernes 13 de septiembre, partiendo a las 9:30 de la mañana del santuario San Juan Pablo Il (Pumpushuti-Poliforum) y que culminará en el parque central.
Por lo que a nombre de la Diócesis de Tapachula hizo la invitación a quienes deseen participar en esta o hacer oraciones y promover la peregrinación para que las autoridades atiendan este clamor de la población.
Señaló que se trata de un evento pacífico en la que los participantes podrán llevar cartulinas con leyendas alusivas a la paz, vestir preferentemente de blanco, ya que cuanto más se noten los signos, serán más significativos y además se tiene programado que durante el recorrido se rezará santo rosario y cantos que inviten a la paz.
Indicó que al llegar al parque central de la ciudad capital los presentes harán un momento ecuménico de oración y concluirán con la lectura de un comunicado general a nombre de las tres Diócesis de Chiapas: Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de las Casas y Tapachula.
El encargado de la diócesis de Tapachula pidio a la población hacer un esfuerzo grande para organizarse en participar y seguir orando para que regrese pronto la paz a las comunidades de la sierra.
"Los hermanos de las comunidades sufren por muchas razones: son usados como escudos humanos en los enfrentamientos de los carteles, viven en situación de esclavitud al no poder transitar libremente por sus comunidades, son obligados para estar en los retenes -denominados filtros- que los carteles mantienen en las comunidades", abundó.