A pesar de que las leyes en México estipulan que cuando menos el 5 por ciento de la plantilla laboral en el sector privado y de gobierno deben ser personas con discapacidad, en Chiapas, este sector sigue excluido de fuentes de empleo
El presidente de la asociación Caminando Por una Esperanza de Vida, Rómulo de Jesús Salazar Arias, afirmó que en el Estado las leyes a favor de los discapacitados solo quedan en buenas intenciones, ya que lamentablemente continúan siendo discriminados por parte de los empleadores.
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Dijo que tan solo la asociación que representa cuenta con más de 100 integrantes, algunos cuentan con licenciatura, ingeniería, o con carreras técnicas, de los cuales solo 5 han podido acceder a una fuente de empleo, cifra que es relativamente baja. Señaló que aquellas empresas que contratan en su personal a personas discapacitadas son beneficiadas con beneficios fiscales por parte de la Hacienda, sin embargo, esto tampoco les abre las puertas a este sector vulnerable.
Detalló que los empleadores rechazan a las personas por su condición o limitaciones físicas, y no ven ellos a seres humanos con capacidades para desempeñar un trabajo como una persona normal.
Salazar Arias indicó que algunas personas con discapacidad son jefes de familia y tienen la necesidad de cumplir con sus responsabilidades básicas en sus hogares, por ello, buscan oportunidades laborales para atender las necesidades de sus hogares.
Puntualizó que ante la falta de inclusión laboral las personas con discapacidad se ven obligadas a autoemplearse con la venta de productos que elaboran ellos o sus familiares, ya que a pesar de sus limitaciones o deficiencias físicas tienen necesidades como cualquier otra personas.
