La escalada de precios de la canasta básica e insumos esenciales en los hogares en el primer trimestre del año derivado de la marcada inflación que alcanza los 7.28 por ciento representa un duro golpe en la economía familiar.
Y es que productos esenciales como la carne, pollo, huevo, tortilla, limón, aceite y el gas licuado de petróleo (Lp), han tenido un marcado aumento en sus precios durante los tres primeros meses 2022.
En un recorrido realizado por Diario del Sur por los mercados públicos se constató que en el primer trimestre del año, los productos han tenido variaciones en sus precios, tal es el caso dell aceite que pasó 45 a 47 pesos, el arroz de 18 a 20 pesos y el azúcar subió de 18 a 24 pesos.
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Asimismo, el casillero de huevos incrementó de 55 a 60 pesos, la sal de 8 a 10 pesos, la tortilla de 19 a 21 pesos, el tomate de 18 a 22 pesos, el frijol de 25 a 28 pesos, el arroz de 18 a 20 pesos.
En el caso del pollo subió de 150 a 180 pesos, la carne de cerdo de 120 a 140 pesos, el más reciente aumento es del kilogramo de carne de res, que pasó de 120 a 150 pesos, derivados de la escasez de ganado y el tanque de gas lp de 30 kilos subió de 611. 1 a 729.9 pesos.
Debido a la escalada de precios de productos de la canasta básica, las amas de casa se ven obligadas a comprar menos cantidad que antes, sin embargo, la situación se torna más complicada conforme avanzan los meses.
Doña Mariana Farías, afirmó que cada vez más el dinero alcanza para menos, por lo que ante los contantes aumentos de los productos de la canasta básica, en su caso ha tenido que reducir el consumo de alimentos porque también necesitan cubrir otros gastos en el hogar.
"La situación es más complicada, ya que el dinero que llega a nuestras manos cada vez alcanza para comprar menos productos, por lo que hemos tenido que prescindir de algunos productos alimenticios, de lo contrario no podríamos subsistir", abundó.
Maura Suárez, dijo que la situación es cada vez más complicada para las familias, quienes son los que recienten el incremento de precios, por lo que se ven obligados a consumir en menor cantidad algunos productos alimenticios.