A pesar de la violencia que se vive en algunas regiones de Chiapas, los servicios turísticos de la Ruta del Café en Tapachula operan sin contratiempos ni afectaciones o pérdidas por la inseguridad en la ciudad.
Las zonas están tranquilas y no han tenido ningún tipo de problema en materia de seguridad, aunque sí con el estado de los caminos, que están totalmente destruidos, sin que alguien haga algo para solucionar esta problemática.
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Al respecto, Tomás Edelman, caficultor de la Ruta del Café, comentó para Diario del Sur que no han enfrentado mayores problemas de seguridad a pesar de la violencia que afecta a Tapachula y otras regiones fronterizas con Guatemala.
"Los visitantes han estado llegando, y sí tuvimos dos meses bajos, pero no por la violencia, sino por la situación económica de las familias debido al regreso a clases y los gastos que esto representa para las familias chiapanecas", expresó.
Añadió que la única problemática que enfrentan desde hace muchos años es el estado de los caminos de la Ruta del Café, que están en malas condiciones, dañando a los vehículos pequeños que llegan de paseo.
Precisó que el pasado fin de semana tuvieron la visita de turistas que recorrieron la zona, y algunos negocios tuvieron "casa llena", como fue el caso de su finca, que abre sus puertas a los visitantes.
"El camino está hecho pedazos, son aproximadamente 40 kilómetros que están prácticamente destruidos, e incluso está mejor la terracería que tenemos nosotros de manera personal", añadió el empresario de la zona.
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Externó que las nuevas autoridades federales, estatales y municipales tienen buenas intenciones de invertir en esta región, y expresó su deseo de poder comunicarse con ellas para mejorar las condiciones de infraestructura de la zona.
Puntualizó que el camino de la Ruta del Café no solo es importante para el turismo, sino que también representa una vía clave para la economía, por la cantidad de café que se mueve y el impacto económico que genera este aromático grano, lo cual es lo más importante.
