El escritor Allan Armando Barreras Galdámez, de El Salvador, llamó a la solidaridad a favor de las migraciones, a tratar a los migrantes como lo que son, seres humanos, y dejó claro que la militarización de las fronteras no es la solución a la crisis humanitaria, se necesita una respuesta inteligente de los gobiernos de todos los países.
México a través de su frontera sur que comparte Chiapas con Guatemala, recibe a miles de migrantes que tienen la misión de mejorar las condiciones de vida para los suyos, no son delincuentes, por lo tanto, los migrantes no deben ser tratados como tal.
Expuso en un encuentro con diputados y escritores chiapanecos en el Congreso del Estado, que lamentablemente existe una gran discriminación en contra de los migrantes, se ha disparado la xenofobia contra ciertos migrantes.
El escritor afirmó que las migraciones no son sinónimos de las pandillas, de los delincuentes, sino de seres humanos que van en busca de un mejor porvenir.
Afirmó que las condiciones sociales de la frontera sur de México no son la adecuadas, ni las políticas públicas idóneas, más bien la presencia militar responden a los compromisos y políticas migratorias del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
El literato consideró que detrás de un migrante hay historias amargas, hombres y mujeres recostados en la miseria, pero con ilusiones y esperanzas, existen muchas heridas en cada historia, llena de hambre y sed, pero es responsabilidad de los gobiernos actuar con responsabilidad.