Activistas pidieron la intervención de la comunidad internacional y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por violación a los derechos humanos y agresiones, tortura y golpes físicos que recibieron migrantes que se amotinaron la noche de ayer.
Explicaron que el amotinamiento se dio porque el Instituto Nacional de Migración los quería obligar a firmar un documento en contra de su voluntad en donde renunciaban a las visas, solicitudes de refugio y que estaba de acuerdo de no ingresar a México en cinco años, lo cual, está en contra de la ley.
Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana A.C., dio a conocer que el día de ayer se registró un motín en la estación migratoria Siglo 21 entre los migrantes que se encuentra en el lugar con agentes de migración y fuerzas federales que resguardan este inmueble.
A través de una masiva a los organismos internacionales y medios de comunicación, señaló que la estación migratoria se encuentran varios extranjeros con lesiones, esto, debido al enfrentamiento ocurrido ayer, pero que hasta el momento las autoridades no han dado información oficial al respecto.
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"Este es el resultado de la política criminal implementada por el Estado Mexicano en esta cacería de migrantes por todo el territorio nacional a pesar de que muchos de ellos tienen y cuentan con Visa Humanitaria que les permite estar de manera legal en el país", relata el documento.
El activista, señala que la detención de los migrantes con documentos se traduce en una gran ilegalidad, abuso de autoridad y de derechos humanos por parte del INM en toda el territorio de la República mexicana.
"El artículo 52 de la ley de migración permite al migrante tener un documento válido por un año en todo México; y por una decisión de escritorio al margen de la ley no se las están haciendo válidas. En este momento existen varados más de 70 mil migrantes en el sureste de México; dónde la COMAR detuvo sus trámites, pues fue rebasado", se podía leer en el escrito.
Además, sindica a Paola López Rodas, subdelegada de migración en Chiapas, de ordenar discrecionalmente no atender a la población migrante, siendo una decisión arbitraria y abusiva que deja en estado de indefensión a mujeres, niñas y niños migrantes, así como familias entera que huyen por una migración forzada.
En la masiva, indica que en el país, Chiapas y principalmente en Tapachula se vive una crisis humanitaria que la actual administración no quiere reconocer y que es aprovechada por el crimen organizado, para sacar jugosas ganancias por el tráfico de personas y reclutamiento de migrantes para las organizaciones criminales del México. Señala que es momento de llamar la atención de la comunidad internacional y visibilizar la gran persecución y exterminio de la población migrante que está ocurriendo en el sureste de México.
En la estación migratoria Siglo 21 del Instituto Mexicano de Migración se encuentran alrededor de 800 migrantes que deben ser a tendidos y revisados por médicos para revisar su estado de salud.
Por su parte, Irineo Música, director de Pueblos Sin Fronteras, pidió la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), ya que el Instituto Nacional de Migración comete muchas irregularidades al interior de la estación migratoria Siglo 21, que provoca los amotinamientos.
"Esperemos que la Comisión Nacional de Derechos Humanos haga su presencia e investigue con los migrantes porque se encuentran algunos heridos, incluso de la Guardia Nacional", aseguró.
Indicó que las irregularidades del Instituto Nacional de Migración en el sur de México esta entre extorsión, venta de documentos, abuso de autoridad y corrupción, pero a pesar de las denuncias nadie realiza una investigación de los señalamientos.
Explicó que en el amotinamiento que se dio a las 12 de la noche, participaron elementos de la Guardia Nacional y agentes de Migración para poder contener la inconformidad de los migrantes que están siendo detenidos con documentos oficiales de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR).
