A escasas semanas que empresarios y organizaciones productivas se manifestaran en contra de la reubicación de las instalaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), así como del Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), las instalaciones de la Terminal de Almacenamiento y Reparto (TAR) de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en Tapachula, fue cercado en su interior, esto para evitar que solo un área de menos de 150 metros cuadros sea ocupada por esas dependencias, esto en caso que llegaran a mudarse a ese sitio.
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Desde las afueras, se puede apreciar cómo dos automóviles, una vagoneta, así como un autobús para pasajeros esperan en uno de las entradas del recinto federal, mientras que toda la barda perimetral ya fue reforzada con alambre conocido como “concertina” o “serpentina” de acero para impedir que ingresen personas ajenas al recinto.
En la esquina, se encuentra la entrada principal que ahora tiene una reja de color negro, y ya no solo es la puerta de aluminio y vidrio que se puede observar en ese lugar, además, comerciantes de la zona, informaron que algunas personas llegaron a dar mantenimiento a una puerta de torniquete que se encuentra a un costado de los dos portones de acceso.
Al fondo, se puede apreciar la malla perimetral con un platico conocido como rompe viento de color verde y negro, el cual solo permitirá que una parte de las instalaciones puedan ser utilizadas por las dependencias de COMAR y ACNUR.
No obstante, hasta ahora se desconoce si la TAR es segura para la población migrante y solicitante de refugio que acuda a ese sitio, ya que podrían existir residuos peligrosos que pueden poner en riesgo a quienes ahí acudan.
Además, también se desconoce si los integrantes de la iniciativa privada mantendrán sus protestas, para evitar que esas instituciones se instalen en la zona comercial más importante de la ciudad.