En una entrevista exclusiva con Julideimy Cruz, psicóloga del IMSS en Tapachula, se abordaron temas fundamentales sobre el Trastorno de Identidad Disociativo (TID), también conocido como Desorden de Personalidad Múltiple (DPM). Este trastorno mental genera una desconexión significativa entre la identidad de una persona, sus pensamientos, recuerdos, sentimientos y acciones, lo que puede impactar profundamente su vida diaria.
Cruz explicó que los pacientes con TID experimentan una fuga de la realidad de forma involuntaria y peligrosa, lo que les dificulta llevar una vida normal. Esto se manifiesta a través de la presencia de dos o más personalidades distintas de manera evidente, no confundidas con simples cambios de rasgos o alteraciones en el estado de ánimo.
El trastorno disociativo puede surgir como respuesta a traumas o como una forma de evadir recuerdos dolorosos. Las diferentes personalidades del individuo pueden manifestarse en momentos de estrés, exacerbando los síntomas y generando brotes disociativos notables.
En cuanto a las posibles causas del TID, se señaló que está vinculado principalmente a abusos y maltratos físicos, especialmente durante la infancia. También puede estar relacionado con entornos domésticos inestables o amenazantes, así como con experiencias de estrés postraumático.
Los síntomas del trastorno incluyen amnesia disociativa, fragmentación de la personalidad, desconexión de uno mismo o del entorno (despersonalización/desrealización), estrés agudo y otros problemas relacionados como depresión, abuso de sustancias, trastornos alimentarios y obsesivo-compulsivos.
El enfoque terapéutico para el TID puede incluir diversos tipos de terapia, programas de atención integral en salud mental, medicación controlada y atención especializada.
Esta entrevista arroja luz sobre la complejidad del trastorno de identidad disociativo y la importancia de la detección temprana, el tratamiento adecuado y el apoyo continuo para las personas que lo padecen.
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