La calle que permite el acceso a las oficinas de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM) y que también permiten llegar a las instalaciones de la Policía Municipal, se han convertido en un foco de infección tanto para los cientos de migrantes y los mexicanos que acuden a la policía municipal a realizar un tramite, como para los vecinos de la zona que incluso han puesto carteles para pedir que las oficinas del INM sean reubicadas.
Cabe mencionar que al lugar acuden diariamente cientos de migrantes que buscan realizar sus trámites para obtener documentos que les permitan movilizarse por el país sin ser detenidos por migración, algunos van y vienen pero otros tantos, "acampan" en el lugar ya sea con casas de campaña o con improvisados espacios cubiertos por cartón, lazo y plásticos.
La movilidad humana en tránsito en esa zona provoca la generación de una gran cantidad de desechos que, a falta de contenedores de basura, quedan regados por todo lo ancho y largo de esa calle provocando contaminación y un foco constante de infección para quienes acuden al lugar, quienes viven cerca y sobretodo quienes ahí se han instalado.
En lugar se puede observar a niñas, niños, mujeres y hombres comiendo o descansado en casas de campaña colocadas en las banquetas o los pocos espacios de áreas verdes alrededor, mientras esperan ser atendidos por las autoridades migratorias, no hay baños, así que muchos hacen sus necesidades donde pueden, lo que con los rayos del sol del mediodía provoca fétidos hedores, que contribuyen al ambiente infeccioso en el lugar.
Algunos de los migrantes que pernoctan en el sitio, explicaron que diariamente barren el espacio o alguna área para procurar que esté limpia, sin embargo, no hay contenedores donde tirar la basura y el camión no pasa como para que puedan deshacerse de lo que juntan, con el transito de la gente durante el día y animales que pasan por el lugar como perros, la tarea se convierte en "el cuento de nunca acabar".
“Esta es la realidad en la que nos toca viví todos los días, que muchos no ven. Sabemos que son condiciones insalubres en las que pasado días esperando que nos atiende y no tenemos más que aguantar los olores”, expresó José Cáceres, originario de Venezuela.
Aseguró que en ese lugar nadie les ayuda y ellos son los que tratan de limpiar la calle que da a la policía municipal y a las oficinas federales de regularización migratoria, ubicadas al sur de Tapachula.
“Acá no tenemos un baño portátil en donde podamos hacer nuestras necesidades y las tenemos que hacer en las calles, lo cual, molesta a los mexicanos y con mucha razón”, externó, lamentó que no pueden hacer nada ante la indiferencia de las autoridades a las que hizo un llamado para que el camión de la basura o personal de limpieza acudan al sitio, si es posible que les pongan contenedores y sobretodo, algunos baños portátiles.
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Cabe mencionar que reiteradamente migración ha dado a conocer que atiende entre 100 y 150 migrantes diariamente en esas oficinas, aunque ya en una ocasión mostraron que podrían ser más pues hubo un día en que dieron salida al trámite de 1,200 personas, hecho inédito que no ha vuelto a repetirse pero que indica que podrían atender a más de 100 personas, diariamente.
