En el 2016 Chiapas se convirtió en el primer estado en tipificar la pederastia como delito, ya que antes estaba enmarcado como violación, sin embargo, pese a reformas a las leyes los casos de abuso sexual contra este sector ha aumentado de manera alarmante.
Con base al Código Penal de Chiapas en el artículo 235, “comete el delito de pederastia y se sancionará con las penas señaladas a quien, sin violencia realice cópula con persona menor de 14 años de edad; imponiéndosele una pena de 15 a 25 años de prisión y de mil a 3 mil días de multa”.
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“A quien, sin violencia ejecute en una persona menor de 14 años de edad, un acto sexual, distinto a la cópula y sin el propósito de llegar a ella, o la obligue a observarlo o ejecutarlo; imponiéndosele una pena de 10 a 15 años de prisión y de 500 a mil días de multa”, agrega la ley.
“Y quien induzca, incite, presione u obligue a una persona menor de 14 años de edad, a realizar actos de exhibicionismo corporal, lascivos, sexuales o de prostitución; imponiéndosele una pena de diez a 15 años de prisión y de 500 a mil días de multa”.
“Asimismo, quien acose o asedie con fines o móviles lascivos a otra persona menor de 14 años de edad, amenazándola con causarle un mal, valiéndose para ello de su posición jerárquica, de su situación laboral, docente, doméstica o cualquier otra que implique ventaja sobre el sujeto pasivo, imponiéndosele de tres a seis años de prisión y de 100 a 300 días de multa”, contempla el Código.
Sin embargo, la sanción se duplica cuando el delito es cometido por un pariente con sanguíneo, cuando la víctima lo sea de dos o más personas, cuando se hace uso de la violencia física moral, se le administra a la víctima alguna sustancia tóxica y la víctima tiene alguna discapacidad física o mental.
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Elsa Simón Ortega, puntualizó que su organización le ha dado acompañamiento legal a los casos y ha logrado llevar tras las rejas a los agresores, prueba de ello, es el último caso de sentencia logrado en Tapachula, en donde se impuso 70 años de prisión en contra de un agresor.
Finalmente mencionó que hay muchos casos de abuso sexual que aún están pendientes de lograr una sentencia y eso se debe a la lentitud con que opera el Poder Judicial del Estado, quienes son los encargados de emitir las sentencias condenatorias.