La incapacidad del gobierno federal para solucionar un conflicto social con el tema migratorio ha generado un verdadero caos en la ciudad de Tapachula, así lo aseguraron molestos, vecinos de las colonias Laureles 1 y 2; argumentaron que llevan más de tres meses solicitando al gobierno la reubicación de las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y hasta la fecha no hay respuesta a esta urgencia.
Los inconformes dieron a conocer que ya entregaron un documento a la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que intervenga y se hagan valer los derechos de la población mexicana que están pidiendo una respuesta a las autoridades federales
Monica Hernández Villalobos, señaló que lo único que están exigiendo es que alguien les dé una respuesta concreta y solución a la única demanda que tiene que es mover las oficinas de esta zona urbana de la ciudad por la inseguridad que viven.
“Vivimos encerrados, no nos avisan y cuando queremos salir de nuestros hogares no lo podemos hacer porque tiene tomadas la calles y ahora decidimos hacerlo nosotros por la falta de la respuesta del gobierno federal, estatal y municipal” expresó.
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Señaló que es la segunda ocasión que hacen esa actividad hasta que el gobierno federal estatal o municipal le dé una respuesta a su petición que es mover las oficinas de la Comisión de Ayuda a Refugiados a un lugar donde no afecte a ningún ciudadano tapachulteco.
Precisó que como vecinos también se han organizado para mover a los migrantes que instalan sus casas de campaña en la puerta de sus hogares, en el parque o en la acera de la avenida 14 de septiembre, en donde se encuentra la Comar.
“La autoridad local únicamente está como observadora de este problema, pues no les pueden dar una respuesta concreta a los vecinos, como ocurrió la primera vez que nos manifestamos y llegó una funcionaria municipal a tratarlos de apaciguar sin una respuesta”, abundó.
Añadió que los vecinos lo único que queremos es un espacio dignos en donde atiendan a los personas que llegan de Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Haití, África, Cuba, Venezuela, Colombia, Panamá, Chile y Brasil.
Precisó que no están en contra de los migrantes que llegan a la ciudad después de dejar toda y vender sus propiedades con la única esperanza de encontrar una mejor calidad de vida en los Estados Unidos, porque ellos no quieren quedarse en la ciudad.
Esta es la segunda ocasión que los vecinos de la colonia Los Laureles 1 y 2 protestan en contra de la reubicación de las oficinas de la Comar, el primero bloqueo lo realizaron el pasado fin de semana.