En el estado de Chiapas, la esperanza de vida se sitúa en 73 años, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Este indicador lo tiene por debajo de la media nacional de vida.
En este respecto, Jorge de los Reyes Herrera, de la Asociación Médicos Generales Capítulo Chiapas, sostiene que los determinantes sociales son los que repercuten en la esperanza de vida de los chiapanecos, principalmente en la frontera sur.
“Los altos índices de pobreza, analfabetismo, accesibilidad y la falta de infraestructura médica a nivel estatal son los factores principales que se deben atacar en esta nueva etapa que se dará, sobre todo, en las comunidades más elevadas para que cuenten con atención médica adecuada”, expresó.
Añadió que hay comunidades que están a tres horas de alguna cabecera municipal para poder trasladar a un paciente y eso se dificulta mucho, principalmente por las noches, ya que no todos tienen un vehículo para poder salir de su comunidad por atención médica y muchas veces mueren en el camino.
Indicó que las principales causas de muerte en la entidad son enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, tumores malignos (especialmente estómago, hígado y próstata), enfermedades hepáticas (principalmente de origen alcohólico) y accidentes de tráfico.
Mencionó que las acciones de prevención de salud pueden ayudar a mejorar este índice, pero se deben aplicar como son, pues están llegando pero no se ejecutan como tal y lo podemos ver con las acciones de descacharrización en las que no participa la ciudadanía.
“Para mejorar la calidad de vida de los chiapanecos es necesario la participación en conjunto entre sociedad y las autoridades de Salud de Chiapas, pues juega un papel importante el autocuidado de la salud”, abundó.
Destacó que hay que informarles a la población que también son responsables del cuidado de su salud, pues hay campañas para hacer mastografías e incluso las unidades móviles llegan a las comunidades y las mujeres no acuden.
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Compartió que se ha dicho muchas veces que el consumo de refrescos embotellados pone en riesgo la salud, sin embargo, la zona alta de Chiapas es donde más se consume ese producto.
Puntualizó que los ciudadanos deben participar en todas las acciones de salud que se realicen desde los primeros inicios de vida, que empieza con que los niños cuenten con su esquema de vacunación, ya que esto sigue y seguirá siendo la forma de prevención más eficaz para los menores y las personas adultas.
