El reinado de la Feria de Tapachula es uno de los acontecimientos que han marcado la vida de jóvenes tapachultecas y desde sus inicios, en el año 1963, las monarcas representan la belleza local y son embajadoras de la hospitalidad de la gente del Soconusco chiapaneco.
Diario del Sur, el decano del Periodismo en Chiapas, tuvo el privilegio de contar con la presencia en sus oficinas de una mujer poseedora de una sutil calidez y de un profundo amor por Tapachula, Doña Mónica Valdez Galán, reina de la feria en 1978. Ella nos cuenta su experiencia como soberana, de lo que ella calificó como “la fiesta de los tapachultecos”.
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Valdez Galán aseguró que ser parte del evento le cambió la vida, una situación que en la actualidad le trae constantes recuerdos y es que por donde vaya la reconocen como la reina que rompió los esquemas de las reinas.
“La mesa directiva nos pidió algo diferente, yo venía de ser la embajadora de la Canaco, no estábamos pensando en la Feria, era para otro evento; surge la idea de convocar a todas las muchachas de Tapachula a participar para poder ser Reina de la Feria”, señaló.
“Mira cuantos años han pasado y aún todavía me preguntan qué por qué cada dirección entra con ideas nuevas. A mi me pidieron que no fuera de china poblana y que no fuera de charra, pues a mi mamá y a mi se nos hizo fácil, pero honestamente creo que nos pasamos un poquito. Me dieron a mi libre elección, ellos no me dijeron: “te vas a poner este traje”, no. Ellos me dijeron “¡diferente!” y mi mamá y yo hicimos la elección y puso su granito de arena el diseñador Gilberto de Alba. Yo andaba feliz con mi traje. Hoy buscaría el motivo para ponérmelo”, asiente contenta doña Mónica.
Don Ricardo y Don Chito Calcáneo fueron a mi casa y son los que hablaron con mis papás, pero en un ambiente de tanta confianza, cariño y cordialidad que era imposible decir que no, afirma la soberana de la FIT del año 78.
Aseguró que la satisfacción de haber sido reina perdura hasta el día de hoy, porque mucha gente la recuerda con mucho cariño. En sus recuerdos Doña Mónica afirma que a pesar de que en Tapachula su reinado no es el de hoy, sin embargo, en la esencia de esta ciudad y su gente es esa combinación de lo originario con la migración, “existe una mezcla que no podemos soslayar, la vida de la Perla del Soconusco está sentada sobre la migración, lo que cambió es la forma de ver la migración y de la gente que llega a la ciudad”.
“La gente de Tapachula es buena, de alguna manera siempre se solidariza con los que menos tienen, pero ahorita esta feria va a ser una con muchísima migración dentro de los invitados a esta feria”, afirma la Reina.
Con nueve nietos que la cobijan con tanto amor, el mismo que ella le ha puesto a su familia y a su tierra, Valdez Galán hace una retrospectiva de lo hermoso que era Tapachula durante la Feria de su reinado y la próxima Expo Feria Tapachula, un ejercicio de memoria y actualidad que la llenan de emoción. Desde su perspectiva la ciudad y sus habitantes tenemos la obligación de ser felices, de compartir lo mejor que tenemos con el de al lado, mucho o poco la feria nos une como pueblo, porque asegura con una hermosa sonrisa en su rostro, que en “la fiesta de los tapachultecos” entramos todos.
