Pidiendo ayuda en las puertas de los bancos, centros comerciales y en el parque central Miguel Hidalgo es como una familia migrante puede sobre vivir en Tapachula, mientras esperan poder continuar su camino a los Estados Unidos.
La familia venezolana, Briceño Reyes, explicó que tienen dos semanas durmiendo en el parque central Miguel Hidalgo, porque se quedaron sin dinero en Guatemala por todos los pagos que hicieron a la policía nacional de ese país.
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Añadió que por cada puesto de control que se toparon en Guatemala les pedian 200 quetzales y para llegar a México pasaron un promedio de 17 puestos migratorios en Guatemala.
“Es complicado, difícil y muy peligroso dormir en este lugar, principalmente por mi hijo de año y medio de edad, pero no tenemos de otra por la falta de recursos económicos”, expresó.
Mencionó que para comer le ha tocado pedir dinero en las calles, supermercados, tiendas, bancos e incluso vender clichés para conseguir recursos para la leche de su hijo.
Melissa Reyes, mencionó que ella convenció a su marido de emprender este viaje por la necesidad y las carencias de alimentación que se vive en Venezuela.
“Lo más difícil fue pasar la selva del Darién, ya que caminamos por tres días entre lodo, ríos y con el riesgo que nos atacara un animal o los grupos armados que operan en esa zona asaltando a las personas que usan esa ruta para llegar a esta ciudad”, abundó.
Aseguró que para ellos no es una opción regresar, porque no tienen absolutamente nada que regresar a buscar a su país de origen y esperararán el tiempo que sea necesario para llegar a los Estados Unidos.
Indicó que la única preocupación que tienen es que su hijo pueda comer, aunque ellos pasen hambre, pues les ha tocado quedarse sin comer o hacerlo una sola vez al día.
“Acá en México hay personas muy buenas que ayudan a los migrantes, pero también hay quienes nos insultan, nos gritan que nos regresemos a nuestros país y que dejemos de invadir sus espacios, pero lo único que les puedo comentar es que no lo hacemos por gusto, sino por necesidad”, externó.
Puntualizó que al parque Miguel Hidalgo todos los días llegan familias de migrantes muy grandes, procedentes de Centroamérica que buscan llegar a los Estados Unidos para tener una mejor calidad de vida.
