DATO: Los inconformes denuncian que el problema lleva varios meses, pero no habían querido hacer la denuncia públicamente por temor a represalias.
Un grupo de policías auxiliares que pertenecen a la secretaría de seguridad y protección ciudadana del gobierno estatal se manifestaron de manera pacifica muy cerca de la base operativa ubicada en la colonia laureles de Tapachula, demandan aumento salarial, servicios médicos de calidad, uniformes, y demás.
En representación de los inconformes Belarmino Uzuel López Mazariegos y Elías Bravo Velázquez evidencian que en 2018 se les prometió un aumento de salario, pero a la fecha no hay nada de ello, mucho menos del pago de viáticos, sin embargo, aducen que existe en la dependencia actos de presunta corrupción que han impedido les lleguen los beneficios prometidos.
Los inconformes que hoy salieron francos explicaron que su salario es apenas de 2 mil 900 pesos quincenales lo que resulta injusto considerando que en su oficio se arriesga la vida y además les descuentan 300 pesos quincenales para un Fideicomiso de Servicios Médicos, cuando necesitan atención tienen que recurrir a otros sistemas públicos o pagar los medicamentos de su propio bolsillo.
Los manifestantes acusaron que el aumento salarial y mejores condiciones fueron prometidos desde que el actual Fiscal General del Estado, Jorge Luis Llaven Abarca, era titular de la SSYPC, cuando en ese sexenio la actual titular de la dependencia Gabriela Zepeda Soto, habría sido su subordinada.
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Ejemplificaron que uno de sus compañeros se accidentó cuando iba del trabajo a su casa, pero no fue apoyado por el Fideicomiso de atención médica sino canalizado a través del extinto Seguro Popular.
Los molestos uniformados solicitan al ejecutivo estatal que intervenga con urgencia para poner fin a esta situación en la que laboran todos los días, pues se enfrentan a peligros de muerte y debería ser una prioridad que gocen de un salario digno, así como de las prestaciones médicas de calidad.
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