Policías municipales de Cacahoatán pararon labores este miércoles, debido a que su solicitud de aumento salarial no ha sido atendida por las autoridades correspondientes.
Los guardias de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), señalaron que requieren de este aumento debido a que las funciones que desarrollan no sólo se concentran en la cabecera municipal y tiene que trasladarse a otros puntos de este municipio, algunos retirados de la mancha urbana.
También señalaron que requieren de más instrumentos de trabajo para poder salvaguardar a los pobladores de este municipio, que cada día concentra más mancha urbana por rápido crecimiento demográfico.
“Hemos pedido a través de un escrito que nos respondan a estas demandas, y la respuesta fue que se atendería en tiempo y forma, pero hasta hoy día, después del algún tiempo, no hemos obtenido una respuesta formal por parte de las autoridades”, expuso uno de los oficiales.
Aunado a esto, solicitaron al gobierno de Chiapas que atienda esta demanda, ya que la SSPM es una pieza medular en la tranquilidad de Cacahoatán y hasta ahora no se ha dotado de los elementos necesarios para que puedan seguir laborando con eficacia.
Los gendarmes también piden servicio médico, mejores instalaciones al operar en el recinto creado para mercado, así como la reparación de cinco unidades patrullas, ya que sólo operan tres.
Se trata de un centenar de policías municipales que suspendieron labores y no realizaron los patrullajes correspondientes, para vigilar las colonias y centros comerciales de esta localidad, cercana a la ruta del volcán Tacaná.
Cacahoatán cuenta con alrededor de 12 barrios, de los cuales cuatro han sido señalados de focos rojos de inseguridad en este municipio. Entre estos puntos, se encuentra el ejido Faja de Oro, que a inicios de 2020 estuvo en el mapa nacional debido a un linchamiento en el que policías no pudieron intervenir.
Diario del Sur documentó las condiciones en que se mantiene el patio trasero de esta corporación policial, al norte de la localidad, donde varias patrullas están convertidas en chatarra y quedaron en el olvido, mientras los elementos policiacos luchan por mantener las pocas unidades que tienen.