A partir de este sábado, unidades del transporte público federal que cubren las rutas en la Costa, Sierra y Frontera incrementarán la tarifa de pasaje entre un 15 y 20 por ciento.
En representación de los transportistas, Carlos Sánchez afirmó que el incremento en las más de mil 500 unidades oscilará entre los 4 y 7 pesos, los cuales varían de acuerdo a las rutas.
Puso de ejemplo en la ruta Tapachula - Ciudad Hidalgo que pasará de 36 a 40 pesos, Tapachula - Huixtla pasará de 28 a 35 pesos y Tapachula - Cacahoatán subirá de 23 a 27 pesos.
Indicó que se ven condicionados a realizar un ajuste en el cobro del pasaje, ante el alza en el costo de insumos, mantenimiento y refacciones, entre otros factores en el gasto de operación. También aseguro que los permisionarios del transporte público federal no habían modificado sus tarifas en los últimos tres años, por lo que durante este tiempo ellos habían absorbido los incrementos, sin embargo, esta situación se vuelve insostenible.
Señaló que este ajuste en el pasaje no se trata de un tarifazo sin sustento, ya que la escalada de precios de combustible, insumos y otros necesarios para dar el servicio están impactando mucho y durante este tiempo lo habían absorbido los permisionarios que mantiene el servicio de movilidad parte de la productividad económica y social que permite a las personas trasladarse y llegar a sus destinos.
Subrayó que las refacciones para dar mantenimiento a los vehículos cada 3 o 4 meses ha crecido en los últimos dos años aproximadamente un 40 por ciento, lo que implica que el transportista mantenga paralizada su economía al enfrentar un escenario difícil por el fenómeno inflacionario y en el que además prevén que el precio de insumos del autotransporte continúe en ascenso.
Detalló que en el caso de los neumáticos sufren un incremento acumulado en sus precios al igual que los sistemas de frenos, las carrocerías, el precio de carga, la electricidad residencial de las terminales y los aceites y lubricantes, entre otros.
Esta situación inflacionaria implica necesariamente este ajuste en las tarifas en el transporte federal que trae consigo el compromiso de mantener un servicio eficiente a los usuarios, y así solventar los gastos fijos y variables que conllevan la prestación de este importante servicio que se requiere mantener en buenas condiciones las unidades.
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Reconoció que están conscientes que en la actualidad cualquier modificación en el aumento de tarifas es un golpe a la economía familiar, por ello han consensado subir únicamente lo que sea necesario a cambio de mantener un servicio eficiente.
Sobre el ajuste a las tarifas la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT), ya tiene conocimiento, indicaron los transportistas y aseguraron que no se busca dañar la economía familiar, pero si mantener un equilibrio razonable, proporcional y equitativo entre los factores de la producción en el servicio del transporte y los usuarios.
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