Elementos de la Policía estatal preventiva y guardias de seguridad han reforzado la terminal de corto recorrido en Tapachula ubicada en pleno centro de la ciudad, a raíz del ataque y amenazas contra un chofer del transporte público en el municipio Cacahoatán.
En un recorrido, la lente del Diario del Sur pudo captar que el ambiente es tranquilo, los usuarios se encuentran seguros, las corridas foráneas siguen con normalidad, excepto la de Cacahoatán que están trabajando tres unidades de las cuales son pocas que llegan a la base, pasan a Tuxtla Chico y otras sólo a llegan a la comunidad de Talismán.
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"Fijate que estamos dando el servicio de Tapachula a Cacahoatán porque la gente no tiene la culpa de lo que está pasando, tengo que comer y aparte los dueños de la concesión me indican que no hay problema por lo que estoy trabajando normalmente, poco a poco paso a la base de Unión y Progreso, a lo lejos veo a la Policía municipal, Ejército Mexicano, estatales y los ministeriales, todo está tranquilo hasta el momento pero hay que seguir la vida no queda de otra" expresó un chofer.
Los trabajos especiales tanto en Tapachula y Cacahoatán han estado siendo coordinados, también esta haciendo labores de trabajo de inteligencia del grupo Antipandillas, que busca erradicar el avance de los pandilleros del barrio 18.
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Las cámaras del escudo urbano C5 están verificando en el primer cuadro a los pasajeros que acuden a las terminales para que cualquiera persona sospechosa, se pueda identificar y así evitar que porten armas de fuego o punzo cortantes.
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