Para combatir la Mosca Mexicana de la Fruta (Anastrepha) y cuidar el mango Ataulfo que se produce en la región del Soconusco, se realiza la liberación de moscas estériles para eliminar la plaga que daña las cosechas, indicó Alfredo Sánchez Sánchez, presidente del Consejo Regulador de la Calidad del Mango Ataulfo.
Explicó que este insecto era un problema grave para los productores de mango, pero con esta estrategia de liberar insectos estériles que produce Moscamed se ha evitado la contaminación de la fruta.
Mencionó que actualmente realizan la liberación de las moscas estériles en 15 mil hectáreas, convirtiéndolas en una zona de amortiguamiento para evitar que la mosca que se mantiene en la zona alta llegue a las cosechas.
“La liberación se hace en la zona media para evitar que las moscas de la fruta lleguen a la zona productiva de la zona baja de Tapachula e infesten el mango que es de calidad de exportación a los Estados Unidos, Canadá, Centroamérica y Sudamérica”, expresó.
Dijo que esta labor biológica les ha permitido dejar de aplicar muchos agroquímicos, realizar un trabajo más eficaz y duradero, y tener mangos mucho más sanos, así como de mejor calidad, que es lo que demanda el mercado internacional.
Te puede interesar: ¿Es redituable ser agrónomo en Chiapas?
Destacó que antes de esta técnica tenían un promedio de 200 a 350 lotes larvados por temporada y se utilizaban un promedio de 30 mil litros de malatión, que daña la salud, pero con esta técnica ha cambiado la manera de combatir la mosca de la fruta.
“Actualmente persiste esta plaga de la mosca de la fruta, pero ya no impacta tanto, porque hasta la mitad de la cosecha de este año únicamente se han reportado 50 lotes larvados”, abundó el presidente del Consejo Regulador de la Calidad del Mango Ataulfo.
Descartó que ya no se utilicen agroquímicos para el control de la plaga, sino que se utiliza este método de liberar insectos benéficos, moscas estériles y parasitoides donde se detecta una infestación.
Detalló que se liberan un promedio de 7 mil parasitoides cada semana, los cuales, según su estimación, ponen un huevecillo dentro del gusano y evitan que salga un gusano contaminado, es decir, sano y que no perjudica la producción.
Puntualizó que la mosca de la fruta mexicana se mantiene bajo control y que la fábrica de Moscamed sigue trabajando con normalidad a pesar del incendio que provocó daños en el área de la planta.
