Escuintla.- Usuarios del transporte público de las modalidades taxis y combis, que cubren las rutas hacia los municipios de Mapastepec, Pijijiapan- y Huixtla, ha sido otras de las víctimas, principales a consecuencias de las extorsiones que presuntamente vienen cometiendo integrantes de las pandillas MS-13 y Barrio-18, que prácticamente han venido operando impugnamente.
Usuarios apuntaron que los verdaderos transportistas de los sitios de taxis y ahora combis ya han denunciado las constantes intimidaciones o amenazas por sujetos desconocidos que vía telefónica se han encargado de atemorizar a conductores de estas unidades del transporte público dentro de esta región de la zona costa de Chiapas, es por ello que han pedido la intervención de la Fiscalía General del Estado (FGE), y Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPyPC), para que realicen fuertes operativos a la través del grupo de antipandillas para detener a los supuestos extorsionadores que desde hace más de seis meses han comenzado a realizar este tipo de acciones ilícitas que han sembrado terror.
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Sin embargo, en la actualidad, los más afectados han sido precisamente los usuarios, pues desde la madrugada del pasado martes, taxistas dejaron de presentarse en los sitios de Santo Domingo, y 8 de Septiembre, entre otros que cubren las rutas hasta la ciudad de Tapachula y la vecina población de Acapetahua, debido al temor de ser asesinados como los casos que ya se han registrado y que han si lamentables.
Los usuarios, mencionan que ellos han sido afectados debido que para viajar a otros municipios de está región han tenido que utilizar el transporte público federal y manejan horarios, lo que genera un atraso para llegar a su destino.
Agregaron que el miércoles, el problema del transporte foráneo, se ha complicado aún más pues las combis de la línea, Costeños, también frenaron sus actividades debido al temor que han acumulado, pues los amenazan que de no cumplir con cuotas les cegaran de sus vidas.
Por otro lado, trascendió que estos pandilleros según se esconden en los municipios de Acacoyagua y Mapastepec, desde donde se han trasladado a Escuintla, donde hacen de las suyas, es por ello que exigen que los operativos permanezcan en esta zona de este triángulo de Acacoyagua, Escuintla, Mapastepec y Acapetahua, pues consideran que no es posible que mientras ellos trabajan honradamente y bajo los riesgos de sufrir accidentes, éstos sujetos les exigen mil pesos de entrada y según 200 semanales, para no ser hostigados.
