La profesora María Magdalena Gómez López, falleció el 31 de enero del presente año tras presentar un posible cuadro de múltiples enfermedades, su última morada fue el Sendero Peatonal sobre la 4a Norte y 3a Poniente, a un costado de una tienda de conveniencia en la ciudad de Tapachula.
Una profesional en todo el esplendor de la palabra, ya que había dado clases a nivel primaria en el ejido Viva México, cantón Villa Flor, Fracción Palmas y en la escuela del 29/a. Batallón. Según datos extraoficiales, ya llevaba por lo menos 15 años viviendo en la vía pública.
Los últimos días de vida de la excatedrática había quedado inmóvil tras una caída, los transeúntes al verla sufriendo pasaban regalándole jugos, algunas monedas, pero de nada servía, ya que desgraciadamente no podía utilizarlas, unas cuantas prendas le servían como almohada y el piso para ella era su cama.
Ante esto, la Cruz Roja Mexicana hizo la labor altruista de intentar rescatarla y canalizarla al Hospital General de Tapachula; se desconoce cómo fue que la profesora terminó en situación de calle, algunos tapachultecos la recuerdan como una persona muy amable, dedicada y sobre todo que también le gustaba hacer manualidades, las cuales, con anterioridad vendía para poder sustentarse en el parque Miguel Hidalgo.
Desafortunadamente, las instancias que deberían haberse encargado de la seguridad y el bienestar de la maestra no hicieron lo que correspondía, ni mucho menos pudieron localizar a sus familiares para buscar alguna alternativa de que ella estuviera bien.
Ahora, en el lugar donde fue vista la última vez la profesora Mary como la conocían los locatarios, han quedado tan solo unas veladoras y flores.
