Cuando nos suelen preguntar ¿cómo estás?, respondemos comunmente “estoy bien”, convirtiéndose en una respuesta automática que facilita avanzar al siguiente tema de conversación sin profundizar demasiado en nuestros propios sentimientos.Sin embargo, la psicóloga Yesenia Ávila, docente en el nivel de preparatoria, desde hace tres años en el Colegio Anthar de Tapachula, revela que estas respuestas pueden ser un velo que oculta emociones más profundas y nos invita a reflexionar sobre las razones detrás de esta conducta.
En México, según un estudio realizado en 2021 por los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP) de la Secretaría de Salud, se estima que 3.6 millones de adultos sufren de depresión. De este total, el uno por ciento presenta casos de gravedad severa.
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¿Pero, por qué decimos que estamos bien?
La baja autoestima se presenta como uno de los motivos principales para evitar expresar los verdaderos sentimientos. La experta destaca que algunas personas temen que sus emociones no sean relevantes para los demás o que no recibirán la atención que necesitan. Asimismo, señala que la incapacidad para expresar emociones puede originarse en experiencias infantiles, especialmente cuando los padres son ausentes o autoritarios.
La negación de los verdaderos sentimientos no distingue entre edades, según la psicóloga. Tanto en jóvenes como en adultos, esta conducta puede estar vinculada a los desafíos psicológicos propios de cada etapa de la vida. En el caso de los jóvenes, la edad y los cambios psicológicos pueden influir, mientras que en los adultos, los múltiples desafíos a los que se enfrentan pueden ser determinantes.
El temor a la opinión de los demás y a la minimización de los problemas también desempeña un papel crucial en la falta de sinceridad emocional. El miedo a no ser escuchado o a recibir juicios negativos puede llevar a las personas a ocultar sus verdaderas emociones. No obstante, la psicológa advierte que hay factores más profundos, como experiencias pasadas y relaciones parentales, que contribuyen a este comportamiento.
¿Es necesario buscar ayuda?
La especialista enfatiza la importancia de buscar ayuda profesional cuando estas respuestas automáticas afectan la vida diaria. Señala que el aislamiento extremo, la evitación constante de interacciones sociales y comportamientos agresivos, especialmente en adolescentes hacia sus padres, son señales de alerta. Consultar a un especialista, según Ávila, es esencial, ya que puede proporcionar un espacio seguro para expresar emociones y encontrar soluciones a los problemas subyacentes.
En resumen, la falsa afirmación de bienestar es un fenómeno que afecta a todas las edades y puede tener raíces en la baja autoestima, la incapacidad para expresar emociones y el temor al juicio ajeno. La consulta con un profesional se presenta como una vía fundamental para abordar estas conductas y fomentar la salud mental.
