Cd. Juárez, Chihuahua.- La mañana de este viernes, el puente internacional Zaragoza Ysleta amaneció completamente despejado y las revisiones en la garita aduanal no se llevan más de 10 minutos, tras el acuerdo firmado entre los gobernadores de Chihuahua y Texas para eliminar las inspecciones exhaustivas impuestas la semana pasada en los puertos fronterizos que conectan a los dos estados.
"Tardé más en ingresar el camión a la plataforma que en lo que me lo revisaron: 10 minutos entré y salí" , refirió uno de los choferes que transporta producto terminado de una empresa que fábrica cuatrimotos y jets skis en esta frontera.
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Unidades de la policía estatal permanecen a un lado del puente y con torretas encendidas permanecen los elementos expectantes y en vigilancia permanente.
El Boulevard 4 Siglos luce completamente despejado, luego de que en días pasados se observaba una fila kilométrica motivada por las minuciosas revisiones en dicho puente internacional.
El jueves, la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, firmó con su homólogo de Texas , Gregg Abbott, un acuerdo para agilizar las revisiones de los tracto mexicanos que ingresan mercancías a Estados Unidos. Un día antes ya se había concretado el pacto con Nuevo León.
Abbott destacó que Chihuahua se comprometió a usar la plataforma Centinela, que cuenta con cerca de 10 mil cámaras de vigilancia, y que permitirá que la Policía Estatal de Chihuahua vigile los vehículos desde que dejan los parques industriales en Juárez hasta que cruzan la frontera.
Destacó que Campos Galván presentó "el mejor plan de seguridad fronteriza" que ha visto "de cualquier gobernador de México".
Abott ordenó incrementar las inspecciones en la frontera después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que acabarán con el Título 42 en mayo.
Esta norma fue proclamada bajo el gobierno de Donald Trump (2017-2021) y ha permitido deportar automáticamente a la mayoría de los migrantes que llegan a la frontera sin posibilidad de pedir asilo.
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En concreto, Abbott ordenó a las autoridades estatales que detuvieran e inspeccionaran todos los tractocamiones y autobuses que crucen desde México hacia Estados Unidos, argumentando medidas de control migratorio y seguridad fronteriza para prevenir el trasiego ilegal de migrantes y drogas.
Los gobiernos tanto de México como EU expresaron su rechazo a esas inspecciones al considerar que perjudican el flujo comercial entre los dos países.
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Texas y México son importantes socios comerciales y, solo en 2020, intercambiaron bienes y servicios valorados en 177 mil 800 millones de dólares, de los que aproximadamente 89 mil millones fueron exportaciones de México a EU y 88 mil 7000 fueron importaciones procedentes de EU, según datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Nota publicada en El Heraldo de Juárez
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