De acuerdo a trabajadores de la Dirección de Parques y Jardines de Tapachula, cada mes las autoridades municipales invierten en promedio hasta 8 mil pesos en los trabajos de mantenimiento por cada fuente de agua que hay en la ciudad.
Dijeron que esta cifra corresponde a la revisión preventiva de la bomba, electroválvulas y cableado, así como a la compra de insumos para la limpieza y desinfección de las fuentes, cuyos trabajos deben ser permanentes para óptimo funcionamiento de las fuentes.
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Señalaron debido a que los equipos, como bombas y cableado lleva más de 10 años en uso, requieren un mantenimiento constante, ya que al menos una reparación de una bomba llega a tener un costo superior a los 20 mil pesos, esto con las fallas más sencillas.
Detallaron que debido a las condiciones de la zona, las fuentes de agua sufren dos grandes problemas. La primera, que también tiene que ver con la salud, ya que fuente de agua sin mantenimiento es el lugar ideal para que los mosquitos del dengue se reproduzcan.
Enfatizaron que esta situación obliga a mantener los reservorios de agua en óptimas condiciones, colocándole productos y controlándolas constantemente.
La segunda, puntualizaron que es la temporada de los vientos y las hojas, estás últimas son las peores enemigas de las fuentes de agua, ya que, al caer sobre los reservorios, las bombas las succionan y así tapan los filtros provocando futuras rupturas en el sistema. Es por esto que se deben duplicar las limpiezas con “saca hojas” y “limpia fondo”.
Cabe hacer mención que en Tapachula solo quedan en funcionamiento dos fuentes de agua, ubicadas en el parque central Miguel Hidalgo, ya que las autoridades han decidido convertir la mayoría de estos lugares en jardineras.