La falta de respuesta por parte de las autoridades universitarias ha llevado a los maestros de la Universidad Politécnica de Tapachula a tomar medidas decididas en defensa de sus derechos ante los atropellos que están sufriendo.
Ante la indiferencia y la ausencia de diálogo por parte de la administración, los educadores han anunciado una marcha como medio para expresar su inconformidad y exigir soluciones inmediatas a las problemáticas laborales que enfrentan.
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La marcha programada será de manera pacífica, buscando visibilizar las inconformidades de los maestros, así como maestros afectados por la malas decisiones administrativas.
Los docentes tomaron como último recurso tras la falta de respuestas satisfactorias, lo que refleja la determinación de los educadores por encontrar soluciones concretas a los desafíos que han surgido en el ámbito laboral.
Además se denuncia la falta de pago de aguinaldo y prima vacacional. Este incumplimiento por parte de la administración universitaria no solo vulnera los derechos laborales fundamentales, sino que también compromete la estabilidad financiera y el bienestar de quienes forman parte de la comunidad educativa.
También denuncia las violaciones a la libre asociación y despidos injustificados del personal docente y administrativo, la falta de asignación de carga académica a profesores de asignatura.
El objetivo de los inconformes es buscar justicia laboral y resguardar los derechos de los trabajadores afectados por la decisión tomada por los directivos .
Se precisa que son 34 docentes del sindicato que no se les ha asignado carga académica, dejando en el desamparo a las familias que dependen de estos ingresos
La creciente tensión entre los maestros y la administración universitaria ha generado un clima de incertidumbre que afecta no solo la calidad educativa, sino también la reputación de la institución.
La falta de medidas correctivas por parte de las autoridades ha dejado a los educadores sin alternativas viables, llevándolos a una posición de extrema necesidad en la que deben luchar no solo por sus derechos, sino por el futuro educativo de la comunidad universitaria.
La marcha pacífica está programada para el día de mañana viernes 12 del medio día, además de ser un medio de expresión, se presenta como un llamado de atención a las instancias gubernamentales, pidiendo su intervención para resolver las irregularidades laborales y financieras que afectan tanto a los docentes como a sus familias.