Le Iglesia Católica hizo un llamado para que se mejore el sistema de seguridad y justicia y evitar que se sigan cometiendo actos de corrupción para que la población viva mejor y en paz, pues actualmente el país está pasando por situaciones complejas.

En la misa dominical, el obispo Jaime Calderón Calderón, mencionó que en el país hay un reclamo generalizado por la violencia que se vive en diferentes estados de la República Mexicana y se tiene que buscar mecanismos para evitar que siga creciendo.

Puedes leer: Obispo pide detener abusos y destrucción de la naturaleza

“Todo lo que se está viviendo en este país está aunado a la impunidad crónica y la corrupción del sistema de justicia, por lo que es necesario se favorezcan los espacios de diálogo plural crítico y positivo para mejorar la justicia y la seguridad”, expresó.

Convocó a toda la comunidad de Tapachula y a los diversos sectores a sumarse al proceso que contempla un itinerario de oración, conversación, discernimiento a nivel local y nacional que promueva la participación de actores de diversos niveles para articular iniciativas que lleven a mejorar la paz, justicia y seguridad.

Explico que se trata de sumarse a cuatro líneas de acción para mejorar la justicia y la paz: jornada de oración mensual, conservatorio por la paz, diálogo justicia y seguridad y plataforma enciende una luz

Aseguró que sólo a través de un conservatorio plural y profundo en el que participen que todos los sectores se puede hacer un cambio verdadero y duradero de la justicia en todo el territorio mexicano que vive momentos complicados por la violencia.

“No vasta que cada uno sea mejor para resolver una situación tan compleja como la que enfrenta el mundo actualmente, todos debemos poner y conjugar gestos generosos aunque nadie los vea o los reconozca”, abundó .

Señaló que se promueve y profundizan las políticas en contra de los migrantes que los ven como una amenaza de seguridad y no come personas que salen de sus país por la inseguridad, pobreza y solo buscan un lugar donde mejorar sus condiciones de vida

Indicó que se constata con preocupación como los gobiernos no garantizan el derecho de permanecer en la propia tierra, ya que siguen promoviendo modelos de desarrollo que ensanchan las desigualdades socioeconómicas y profundiza las condiciones de precariedad que viven la mayoría ya empobrecida.