Con la llegada de los cambios de temperatura las gripes y resfriados se hacen notar, la elección adecuada de alimentos puede marcar la diferencia en la recuperación. Aquí te presentamos una guía sobre qué comer y qué evitar para enfrentar la gripe de la mejor manera posible.
Agua, bebidas con electrolitos y té de hierbas:Mantenerse hidratado es esencial durante la gripe. El agua, las bebidas con electrolitos y el té de hierbas ayudan a prevenir la deshidratación.
Caldo y sopas de pollo: Rico en nutrientes y antioxidantes, el caldo no solo es reconfortante, sino que también contribuye a prevenir la deshidratación. La sopa de pollo contiene ingredientes que reducen la inflamación y mejoran la respuesta del sistema inmunológico. Una opción reconfortante y beneficiosa.
Paletas de hielo (de agua): Aunque comúnmente se cree que las cosas frías empeoran la gripe, desmitificamos esta creencia: las paletas de hielo, contrario a lo que se dice, pueden desinflamar el tejido, ofreciendo un alivio refrescante.
Frutas y verduras con vitamina C: Alimentos como espinaca y col, ricos en Hierro y vitamina C, ayudan a reducir los síntomas del resfriado y combaten la inflamación.
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Que no se debe comer cuando se tiene gripe
Bebidas con cafeína:Evitarlas es crucial, ya que la cafeína puede contribuir a la deshidratación.
Refrescos y alcohol:Ambos pueden deshidratarte y afectar negativamente el sistema inmunológico.
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Productos lácteos:Pueden aumentar la producción de mucosidad, empeorando la congestión.
Alimentos picantes:Aunque deliciosos, los alimentos picantes pueden irritar la garganta y empeorar la incomodidad.
Recuerda, siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud para obtener orientación personalizada según tus necesidades y condiciones médicas. ¡Cuida tu alimentación y mejora tu bienestar durante la temporada de gripe!