La caravana de migrantes que salió el pasado sábado del Suchiate, municipio limítrofe entre México y Guatemala se fortaleció en el ejido Viva México y continúa su camino hacia el sueño americano.
El contingente integrado por alrededor de 300 migrantes partió ante la falta de atención del Instituto Nacional de Migración (INM), para otorgarles documentos que les permitan avanzar sin problemas de territorio mexicano.
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Al llegar a Tapachula se dispersaron, sin embargo, avanzaron en vehículos a Viva México en donde la caravana se fortaleció con 200 migrantes más, y retomó su trayecto desde el Ejido Viva México, avanzando sobre la carretera Costera bajo temperaturas muy extremas.
Son cerca de 50 kilómetros los que han avanzado los migrantes, entre ellos mujeres y niños bajo temperaturas superiores a los 40 grados, sin apoyo de ambulancias de instituciones de salud, solo resguardados por dos unidades de la Guardia Nacional división caminos.
Durante su recorrido pasaron cuatro puntos migratorios sin dificultad, el primero ubicado a la salida de Suchiate, el segundo, establecidos entre municipio de Metapa y Frontera Hidalgo, el tercero, sobre el libramiento de Metapa y el punto de revisión de El Manguito.
Tras llegar a Tapachula la noche del pasado sábado, los migrantes intentaron quedarse en el parque Bicentenario, sin embargo, policías municipales impidieron que el contingente pernoctara en este lugar, lo que obligó a los extranjeros a dispersarse en diversos puntos de la ciudad, mientras que otros decidieron continuar hasta Viva México.
Francisco, migrante de Venezuela, afirmó que Instituto Nacional de Migración (INM), les ha negado permisos para salir de la frontera sur, sin embargo, su intención no es de permanecer en esta ciudad sino continuar hacia los Estados Unidos.
Dijo que sin permisos ellos no pueden salir en el transporte público porque son detenidos, por ello habían decidido salir en caravana, pero ante lo difícil del camino muchos han renunciado.
"Déjenos pasar, déjenos avanzar traemos niños y nuestra intención no es quedarnos acá, sino continuar hacia el sueño americano, por ello, pedimos al Instituto Nacional de Migración y a las demás autoridades pasó libre", abundó.
Angela, migrante de Venezuela, indicó que la situación que han vivido ha sido muy complicada, pero no piensan desistir, ya que no es opción regresar a sus países de origen en donde el escenario es lamentable.
"Por amor a nuestros hijos les pedimos a las autoridades y a Derechos Humanos pasó libre, porque nosotros solo queremos una vida mejor para nuestros niños y le pedimos a esta gente hermosa de México que nos ayuden, que nos den pasó libre", sostuvo.