/ sábado 7 de diciembre de 2019

Encantador de plagas, tras expriistas en Chiapas

Clase Política

En los mejores tiempos del priismo chiapaneco en pasados aseguraban, que para ganarle al partidazo (San Mingo) tenían que hacerlo con sus mismas estructuras (traiciones); es decir, fracturándolos o de plano, llegándoles al precio a los mercenarios y parásitos que ahí deambulaban. Desde aquel Picapiedra hasta el que pregonaba capital social envidiable, aunque fuera puro jarabe de pico. Criaron fama y se ofertaron como tiburones en el estanque de pupos.

Hoy en día, la historia se sigue repitiendo, pero con actores más disgregados como inmundo desperdicio. Ser vividores del priismo a muchos les dejó buenas ganancias. Les fue redituable y hoy ya sin futuro ahuecan el ala tras el desgastado ciclo político que también tiene desenlace terminante.


¿Dividir lo que ya está despedazado y medio muerto?

Ese modus operandi se hizo cultural en Chiapas. Hoy seguimos constatando grupos desencantados buscando nuevos horizontes para no vivir en el error o de plano, evadir la crisis y la etapa de hambrunas.

El dinero mal habido y fácil se les hace agua a los vulgares chaqueteros y más cuando sufren de vicios existenciales. Optan por anteponer simulaciones y apariencias para dar la última estocaba a lo que ya está medio muerto.

Son depredadores que olfatean y comen del animal medio vivo o bien muerto como la reciente renuncia de los expriistas Enrique Arriola Moguel, Jorge Constantino Kanter, Marco Antonio Coutiño Monzón y el “Microbito”, Hugo Mauricio Pérez Anzueto, quien al parecer busca gotitas de ingenuos para concretar su residencia en lo alto de conocido Cerro en Tuxtla Gutiérrez.


PRI no gana gubernatura desde el año 2000.

Pero irónicamente el PRI no gana una gubernatura en Chiapas desde el 2000, cuando la irrupción de Vicente Fox Quesada como abanderado del PAN, cobijó a Pablo Salazar Mendiguchía, promoviendo una mega alianza contra el priismo por herencia disgregado y con estridencias en los últimos siete sexenios desde Absalón Castellanos Domínguez, Patrocinio González Garrido, Elmar Setzer Marseille, Javier López Moreno, Eduardo Roblero Rincón, Julio César Ruíz Ferro y Roberto Albores Guillén.

Si hacemos memoria en Chiapas, el PRI jamás la ha tenido fácil ante el avasalle de partidos, dinero y sobre todo, la famosa moneda de cambio que significa la entidad en negociaciones de alto nivel en la supremacía nacional.


Conrado Cifuentes, el encantador de plagas

Por lo anterior, la fuga de ratas y cucarachas de San Mingo será bien recibida por Conrado Cifuentes, dirigente estatal del Partido Chiapas Unido (PACHU). Un instituto político satélite que siempre ha buscado crecer con las estructuras disgregadas de otros partidos y que bueno. Pues de lo anterior se construyen nuevas facetas, nuevos ciclos y nuevos tiempos.


Nexos y Contextos

Patrullaje federal tras asesinatos

Por la inoperancia de la Policía Municipal del alcalde Óscar Gurría Penagos, la Policía Federal tuvo que salir al quite mediante recorridos diversificados en la Perla del Soconusco. En las últimas horas, la grave situación de violencia, asesinatos y feminicidios a permeado en la región, atrayendo reflectores nacionales e internacionales ante la alerta máxima por el fenómeno Mara. ¿Qué sigue?

Acertijo Público

*¿De qué panteón habrá sacado su lista nominal del 94 por ciento de población participante en la Consulta Ciudadana de Óscar Gurría, aún alcalde de Tapachula? Ya ni vergüenza al tratar de fraguar sus pininos con las prácticas mañosas de la vieja usanza. “Vaya a engañar a su abuelita”, le dicen en Los Cafetales.

Comentarios antoniozavaletah@gmail.com

Clase Política

En los mejores tiempos del priismo chiapaneco en pasados aseguraban, que para ganarle al partidazo (San Mingo) tenían que hacerlo con sus mismas estructuras (traiciones); es decir, fracturándolos o de plano, llegándoles al precio a los mercenarios y parásitos que ahí deambulaban. Desde aquel Picapiedra hasta el que pregonaba capital social envidiable, aunque fuera puro jarabe de pico. Criaron fama y se ofertaron como tiburones en el estanque de pupos.

Hoy en día, la historia se sigue repitiendo, pero con actores más disgregados como inmundo desperdicio. Ser vividores del priismo a muchos les dejó buenas ganancias. Les fue redituable y hoy ya sin futuro ahuecan el ala tras el desgastado ciclo político que también tiene desenlace terminante.


¿Dividir lo que ya está despedazado y medio muerto?

Ese modus operandi se hizo cultural en Chiapas. Hoy seguimos constatando grupos desencantados buscando nuevos horizontes para no vivir en el error o de plano, evadir la crisis y la etapa de hambrunas.

El dinero mal habido y fácil se les hace agua a los vulgares chaqueteros y más cuando sufren de vicios existenciales. Optan por anteponer simulaciones y apariencias para dar la última estocaba a lo que ya está medio muerto.

Son depredadores que olfatean y comen del animal medio vivo o bien muerto como la reciente renuncia de los expriistas Enrique Arriola Moguel, Jorge Constantino Kanter, Marco Antonio Coutiño Monzón y el “Microbito”, Hugo Mauricio Pérez Anzueto, quien al parecer busca gotitas de ingenuos para concretar su residencia en lo alto de conocido Cerro en Tuxtla Gutiérrez.


PRI no gana gubernatura desde el año 2000.

Pero irónicamente el PRI no gana una gubernatura en Chiapas desde el 2000, cuando la irrupción de Vicente Fox Quesada como abanderado del PAN, cobijó a Pablo Salazar Mendiguchía, promoviendo una mega alianza contra el priismo por herencia disgregado y con estridencias en los últimos siete sexenios desde Absalón Castellanos Domínguez, Patrocinio González Garrido, Elmar Setzer Marseille, Javier López Moreno, Eduardo Roblero Rincón, Julio César Ruíz Ferro y Roberto Albores Guillén.

Si hacemos memoria en Chiapas, el PRI jamás la ha tenido fácil ante el avasalle de partidos, dinero y sobre todo, la famosa moneda de cambio que significa la entidad en negociaciones de alto nivel en la supremacía nacional.


Conrado Cifuentes, el encantador de plagas

Por lo anterior, la fuga de ratas y cucarachas de San Mingo será bien recibida por Conrado Cifuentes, dirigente estatal del Partido Chiapas Unido (PACHU). Un instituto político satélite que siempre ha buscado crecer con las estructuras disgregadas de otros partidos y que bueno. Pues de lo anterior se construyen nuevas facetas, nuevos ciclos y nuevos tiempos.


Nexos y Contextos

Patrullaje federal tras asesinatos

Por la inoperancia de la Policía Municipal del alcalde Óscar Gurría Penagos, la Policía Federal tuvo que salir al quite mediante recorridos diversificados en la Perla del Soconusco. En las últimas horas, la grave situación de violencia, asesinatos y feminicidios a permeado en la región, atrayendo reflectores nacionales e internacionales ante la alerta máxima por el fenómeno Mara. ¿Qué sigue?

Acertijo Público

*¿De qué panteón habrá sacado su lista nominal del 94 por ciento de población participante en la Consulta Ciudadana de Óscar Gurría, aún alcalde de Tapachula? Ya ni vergüenza al tratar de fraguar sus pininos con las prácticas mañosas de la vieja usanza. “Vaya a engañar a su abuelita”, le dicen en Los Cafetales.

Comentarios antoniozavaletah@gmail.com